Ministerio del Deporte

Incluso, el espacio permitió recordar con gratitud y una fugaz sensación de nostalgia, los tiempos cuando los logros se dieron a conocer en el país a través de la televisión, cuya transición al formato de color coincidía con las buenas nuevas de la época.

Recopilación de remembranzas en las que siempre primó un denominador común: la bandera tricolor en lo más alto. "Ser deportista no era como ahora, a nosotros nos tocó más difícil, con menos recursos, sin tecnología y con el único patrocinio de nuestros padres. En esos tiempos Colombia apenas se daba a conocer", recuerda Aida Nelly Huard, medallista de oro en los Juegos Panamericanos de México 1982.

Con la misma alegría que cuando alzaron los trofeos y portaron por primera vez los fajones de campeones mundiales, los 46 exatletas que participaron en el encuentro del programa de Coldeportes recibieron con orgullo la medalla que les entregaron Clara Luz Roldán, directora del Departamento Administrativo; Ana Milena Orozco, directora técnica de Posicionamiento y Liderazgo Deportivo de la entidad, y Helmut Bellingrodt, quien además de pertenecer al grupo de glorias, es el jefe de misión de Colombia en los Juegos Centroamericanos y del Caribe.

A la tarima dispuesta para el homenaje se subieron con la misma energía que cuando lo hicieron en podios del extranjero. Algunos, ya superados por el desgaste de la vejez, se acercaron lentos pero motivados por la gratitud que tras el paso del tiempo los sigue acompañando.

"Pertenecer al programa Glorias del Deporte de Coldeportes nos hace sentir que nuestros esfuerzos siguen teniendo una recompensa y que los nombres de cada uno de nosotros aún son referentes del deporte nacional. Es una verdadera bendición", asegura José ‘Sugar Baby’ Rojas, quien recuerda entre risas su regreso a Barranquilla tras el título mundial de boxeo que obtuvo en Estados Unidos en la década de los ochentas: "Al bajar del carro de bomberos que me esperaba a mi regreso al país, alguien intentó sacarme la billetera del bolsillo".

Anécdotas, sonrisas, fotografías, abrazos prolongados. La jornada de este miércoles en Barranquilla, a horas del inicio de los XXIII Juegos Deportivos Centroamericanos y del Caribe, fue el espacio perfecto para reiterar la gratitud y el orgullo que sienten los colombianos por quienes en el ayer alcanzaron la gloria que enmarcó en la eternidad la grandeza de sus triunfos.