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Las balas, otrora razón de miedo y zozobra, hoy son sinónimo de alegría en el municipio de El Bagre, en el Bajo Cauca Antioqueño, esta vez en el marco del clasificatorio de atletismo de Supérate Intercolegiados de la región Eje Cafetero Pacífico.

La impulsión, sinónimo de aleg

Daniel Armando Pinzón Guevara, de 17 años, fue el mejor de la prueba. Su lanzamiento alcanzó los 15,76 metros. Valió la pena alejarse de sus padres, pues él es originario de Caucasia. Se fue en búsqueda de cumplir sus sueños en el deporte, de progresar.

"Un amigo me invitó a practicar este deporte cuando dejé el baloncesto. Empecé en Caucasia pero cuando ya fui avanzando decidí buscar un entrenador más especializado que me ayudara a mejorar en el lanzamiento de bala", cuenta Daniel, quien ha sido acogido por Silvio Rentería.

La violencia ha estado presente en la zona por muchos años. Silvio Rentería, el entrenador, dice que "es un lugar caliente por el clima y por el plomo". Jóvenes a quienes el ‘profe’ Silvio entrenó, han caído a causa de la violencia. Por eso, la práctica constante de algún deporte los aleja de la misma, los salva.

"Los profesores nos mantienen muy ocupados, con expectativas y metas altas. Esto nos permite estar lejos de los vicios y de las malas andanzas", destacó Daniel.

Como Pinzón, muchos de los jóvenes que llegaron a Cali desde Chocó, Nariño, Caldas, Valle del Cauca, Quindío, Risaralda, Cauca y Antioquia, nunca habían tenido la experiencia de estar en un hotel o en una capital.

Aunque falta la final nacional de Supérate Intercolegiados de Coldeportes, ya ganaron su cupo en los clasificatorios que se desarrollan en Cali y terminan este martes. Ellos ya son todos unos campeones.