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Director de Coldeportes, satisfecho por el desarrollo de las dos primeras disciplinas de los Juegos Nacionales

Botero: "Las pesas y el patina

Una papayera le ponía más ritmo al ambiente. Al otro lado de la acera un grupo entusiasta de madres e hijas entonaban el himno de Antioquia. A escasos metros de la meta los ciclistas se bajaban de la bicicleta para aplaudir. Parecía todo, menos una despedida, pero así terminó el patinaje de los Juegos Nacionales este domingo en Rionegro. En una fiesta deportiva.

Alguien que no necesitaba invitación para ser parte de ella porque es su anfitrión, acudió puntual. Y se vistió para la ocasión. De blazer y corbata, Andrés Botero Phillipsborune, director de Coldeportes, disfrutó de la emocionante definición de las maratones, pruebas con las que terminó la segunda disciplina de las justas, luego de que las pesas lo hicieran el viernes en Quibdó.

"Llegar y apreciar este ambiente es reconfortante. Ese espíritu de sana competencia, con una presencia masiva de público, ofrece el entorno que nuestros deportistas siempre merecen. Esto hace que los Juegos tengan un preámbulo importante para que a partir del 7 de noviembre en las sedes y subsedes se viva algo igual o mejor", dijo emocionado el máximo dirigente del deporte colombiano.

Para Botero, "las pesas y el patinaje fueron el mejor abrebocas para la fiesta que empieza a apreciarse. Es un gran desafío el que se tiene. Como en cualquier actividad de la vida, ha habido tropiezos, pero la disposición de Coldeportes siempre ha sido la de solucionar a la mayor brevedad posible los inconvenientes que puedan surgir".

De igual forma, agradeció a las alcaldías de Guarne y Rionegro por haber "ofrecido las garantías para los deportistas en sus escenarios". Y agregó: "Siempre ha sido premisa para nosotros ofrecerles a los atletas lo mejor en infraestructura deportiva y por eso ante el atraso en las obras del patinódromo en el Parque Deportivo de Ibagué, el Comité Organizados Nacional confió en estos dos municipios antioqueños que cumplieron a cabalidad".

"En cuanto al coliseo El Jardín de Quibdó, donde se llevaron a cabo las competencias de pesas, fue acondicionado, contra el escepticismo de algunos, de gran manera, al punto que los propios deportistas y entrenadores aseguraron que fue un escenario tipo Panamericanos, por lo que el comité organizador local merece todos los aplausos", resaltó el director de Coldeportes.

Y en medio del balance, se unió a la fiebre de aplausos de los asistentes, para reconocer el esfuerzo de Yesenia Escobar y Carlos Pérez, ambos del Valle, que se impusieron en las maratones. Una vez cruzaron la meta, después de 42 kilómetros de recorrido, fueron felicitados por Botero. "Ganar con semejante autoridad y después de un esfuerzo tan grande, los convierte en dignos campeones", les dijo en el podio que se montó en plena línea de llegada.

Encabezó la premiación, compartió con delegados de distintos entes departamentales que aprovecharon su presencia para plantearle inquietudes. Los atendió a todos, también a los medios de comunicación y luego partió presuroso hacia Medellín para otra cita importante de los Juegos: recibir el Fuego Deportivo.

El símbolo de las justas que partió de Nabusímake, en la Sierra Nevada de Santa Marta, ya completa semana y media de recorrido por distintos lugares del país. Este domingo llegó a la capital antioqueña para recorrer sus principales calles y tener como epicentro del acto el coliseo Iván de Bedout. Allí Botero vivió otra fiesta. La que espera que se repita a partir del próximo 7 de noviembre en Chocó y Tolima.